anoche toqué tu alma con un suave beso
desahogué mis sencillos deseos
desprendí, con paciencia, la espera
y te ofrecí, de una vez, mi ser entero
ayer miré por la ventana buscándote
comencé a extrañar tus palabras
maticé los colores con sonrisas
y definí el seguir un camino certero
anoche dibujé caricias sobre tu cuerpo
en cada uno de los destellos de tu piel
te amé con mi sinceridad y voz
y obtuve de tí lo que mas quiero
ayer sucedió, fué el día de mis alegrías
pues comprendí que nos pertenecemos
la claridad se esparció en sucesos
y nuestras almas engendraron un tiempo